El miércoles 30 de marzo partió a la Casa del Padre a sus 97 años de edad, la Hna. Ana María Lagos Burgos, religiosa de nuestra Congregación.
Ella nació en la ciudad de Mulchén el 30 de octubre de 1924, sus padres fueron Don Pedro Lagos y Doña María Burgos, quienes la formaron en un ambiente muy cristiano.
En el año 1945 Ingresó a la Congregación con la edad de 26 años; siendo su Toma de Hábito el 20 de abril de 1946. Posteriormente, realiza sus Primeros Votos el 16 de Julio de 1947 y los Votos Perpetuos el 12 de Abril de 1953, teniendo, por tanto, hasta la fecha 77 años de vida consagrada.
Hna. Ana María prestó sus servicios principalmente en el área de salud de nuestra congregación: en el Hospital de Copiapó y Mulchén, en la Casa de Reposo de Viña del Mar, Ñuñoa y Puente Alto. Cabe señalar que fue en la Clínica “Santa Cecilia” donde más tiempo estuvo realizando su vida apostólica. Además, permaneció por un breve periodo en los colegios de Zúñiga, Ñuñoa y Santa Cecilia.
Se caracterizaba por su prolijidad, especialmente en bordados de manteles para el altar, purificadores y palias, todos estos, elementos utilizados en la Eucaristía. A ello se agrega su piedad en la oración diaria y en la especial devoción a María Santísima.
Durante los últimos 7 años estuvo en la enfermería de nuestra Congregación, en donde pudo compartir con otras hermanas y dedicar tiempo a la oración que tanto amaba.
Hna. Ana María, al paraíso te lleven los ángeles, a tu llegada te reciban los mártires y te introduzcan en la ciudad santa de Jerusalén. Que el coro de los ángeles te reciba y junto con Lázaro, pobre en esta vida, tengas descanso eterno.
